No hay productos en el carrito!
ENVÍO GRATUITO POR ENCIMA DE 75€
CUPÓN DE BIENVENIDA DE €5 "CIAO5"
El té blanco (白茶 en chino) proviene de la Camellia sinensis, la misma planta que da origen a todos los tés del mundo, pero lo que lo hace único es su proceso de elaboración mínimo y la selección de las partes más preciadas de la planta.
Este tipo de té se obtiene de las yemas o de las primeras hojas de la Camellia sinensis, que después de ser recolectadas se dejan secar a la luz natural del sol, para prevenir la oxidación, antes de ser procesadas. Se trata, por tanto, de un té con una ligerísima oxidación, que se procesa poco y con técnicas principalmente manuales, lo que lo convierte en uno de los tés más preciados existentes.
El nombre "té blanco" deriva de la sutil pelusa blanco-plateada que cubre las jóvenes yemas aún cerradas, dándoles un aspecto casi mágico, similar a agujas de plata cubiertas de nieve.
Nacido en las montañas brumosas de la provincia de Fujian, en China, el té blanco cuenta con una historia que se remonta a la dinastía Tang (618-907 d.C.). Sin embargo, el verdadero té blanco moderno fue perfeccionado entre 1772 y 1782 por la familia Xiao en el condado de Jiang Yang, alcanzando el ápice de su refinamiento en 1796 con la creación del legendario Bai Hao Yin Zhen.
Durante la dinastía Song, este elixir se convirtió en la bebida predilecta del emperador Huizong, tanto que fue considerado un "tributo imperial" servido exclusivamente por vírgenes con guantes blancos, símbolo de pureza y respeto. Los poetas de la época lo describían como "blanco como las nubes, verde como un sueño, puro como la nieve y aromático como una orquídea".
Hoy en día, además de los cultivos tradicionales chinos, el té blanco también se produce en Taiwán, Nepal y en el norte de Tailandia, pero Fujian sigue siendo el corazón palpitante de este antiguo arte.
En Terzaluna puedes comprar los mejores tés blancos provenientes de China en formato suelto. Descubre los tés más selectos del mundo.
Descubre la Selección de Tés Blancos Terza Luna
Los orígenes del té blanco son inciertos y envueltos en leyenda; sabemos que su cultivo comenzó en China, donde aún hoy, especialmente en la provincia de Fujian, se trabajan las variedades de té blanco más preciadas, pero los estudiosos y expertos en té discrepan sobre el período histórico en el que este noble té fue producido por primera vez. Muchos sabrán que el té blanco también es conocido como “té del Emperador”, haciendo referencia a la calidad de este producto. Es seguro que la costumbre del té se difundió durante la era de las primeras dinastías imperiales (600-1300 d.C.) en toda China: según algunos testimonios, los ciudadanos estaban obligados a pagar un tributo anual a los emperadores en forma de tés raros y nobles, es decir, los tés obtenidos de las yemas más jóvenes y delicadas de la planta del té. De aquí nacieron los jardines de té imperiales, donde se cultivaban estas variedades de té preciadas. Estos tributos de té son considerados los primeros tés blancos, aunque eran muy diferentes del té blanco tal como lo entendemos hoy: en la época de las dinastías imperiales chinas, los brotes de té, después de ser recolectados, se cocían al vapor, se les quitaban las hojas externas, se enjuagaban, se secaban al aire y luego se molían, produciendo un polvo blanquecino-plateado que, al igual que el té matcha, se emulsionaba en agua caliente. Esta preparación era considerada el mejor té existente, destinado solo a quien podía permitírselo, es decir, el emperador: de aquí la denominación de “té del emperador” dada al té blanco. Sin embargo, hoy en día, el té blanco es un producto muy diferente del que narra la leyenda: uno de los primeros testimonios sobre el té blanco tal como lo entendemos fue encontrado en una publicación inglesa fechada en 1876, donde sin embargo se etiquetaba como té negro, ya que las hojas no se cocían al vapor — como ocurre con el té verde — para bloquear el proceso oxidativo.
La magia del té blanco reside en su extrema simplicidad productiva, un proceso que respeta la filosofía taoísta del wu wei - el arte de no actuar, dejando que la naturaleza siga su curso natural.
La recolección del té blanco es un ritual que requiere precisión milimétrica y un tiempo perfecto. Se realiza exclusivamente en primavera, durante los primeros días de abril, cuando los brotes aún están cerrados y cubiertos por la preciada pelusa plateada. Los recolectores deben trabajar en las primeras horas de la mañana, cuando el rocío se ha evaporado pero el sol aún no es demasiado intenso.
Cada brote se selecciona con cuidado meticuloso: para producir un kilogramo de Bai Hao Yin Zhen se necesitan aproximadamente 40,000 brotes, recolectados uno por uno. Es un trabajo que requiere años de experiencia y manos delicadas, capaces de reconocer al tacto la maduración perfecta.
Una vez recolectados, los brotes se colocan sobre esteras de bambú y se dejan marchitar naturalmente al sol por intervalos breves de 20 minutos, durante un total de 1-2 horas. Este proceso delicado permite una oxidación parcial del 5-20%, mucho menor en comparación con el té negro que alcanza el 80-100%.
La fase siguiente se lleva a cabo en ambientes controlados con ventilación natural, donde las hojas pierden gradualmente su humedad en el transcurso de 2-3 días. Es aquí donde se desarrollan los aromas característicos y la dulzura natural que distingue al té blanco.
La última fase incluye un secado delicado que reduce el contenido de humedad al 4-6%, ideal para la conservación. Cada hoja es inspeccionada manualmente y seleccionada con pinzas especializadas, asegurando que solo los brotes perfectos lleguen a tu taza.
Este proceso artesanal, transmitido de generación en generación, preserva intactas las propiedades nutritivas y confiere al té blanco su extraordinaria riqueza de antioxidantes, superior a cualquier otro tipo de té.
El té blanco ofrece una experiencia sensorial única, delicada como una caricia y compleja como una sinfonía. Al primer sorbo, te envuelve una dulzura natural que recuerda a la miel de acacia, seguida de notas florales de jazmín y madreselva que bailan en el paladar.
El color de la infusión es un amarillo pálido-dorado, casi transparente, con sutiles reflejos plateados debidos a la pelusa de los brotes (¡pero no confundir con el té amarillo!). El aroma es el del "heno recién cortado", con fragancias herbáceas que evocan los prados montañosos al amanecer.
Pero es en la evolución del sabor donde el té blanco revela su verdadera magia: la primera infusión ofrece frescura y notas florales, mientras que las siguientes revelan matices afrutados de melón, durazno y uva blanca. El retrogusto es persistente y limpio, con una sutil mineralidad que atestigua la pureza de las aguas montañosas de Fujian.
Esta complejidad aromática, unida a su extrema delicadeza, hace que el té blanco sea perfecto para quienes buscan un momento de contemplación y bienestar, lejos del caos cotidiano.
El té blanco es un concentrado de bienestar en una taza. Con solo 2-4 calorías por 100ml, representa una fuente excepcional de nutrientes valiosos para nuestro organismo.
Contenido vitamínico por 100ml:
Minerales esenciales:
El verdadero tesoro: la concentración de polifenoles (138-200 mg por 100ml) y catequinas (50-150 mg por 100ml), superiores a cualquier otro té. Estos compuestos representan la clave de los extraordinarios beneficios del té blanco.
El contenido de cafeína en el té blanco es moderado (15-20 mg por 100ml), significativamente inferior al té verde (30 mg) y al té negro (40-50 mg), haciéndolo ideal incluso para quienes son sensibles a los estimulantes.
Las propiedades del té blanco derivan de su extraordinaria riqueza de compuestos bioactivos, preservados por el proceso de elaboración mínimo. En el centro de este tesoro nutricional encontramos las catequinas, en particular la EGCG (epigalocatequina galato), que representa el 50-80% del contenido total.
Veamos las principales propiedades asociadas al té blanco:
Los beneficios del té blanco están respaldados por un creciente cuerpo de evidencias científicas que confirman la sabiduría milenaria de la medicina tradicional china.
La investigación científica ha demostrado que el consumo regular de té blanco puede reducir la presión sistólica en 3-5 mmHg y la diastólica en 2-3 mmHg, gracias a la vasodilatación mediada por el óxido nítrico. Los flavonoides mejoran además la función endotelial en un 15-20%, reduciendo el riesgo de aterosclerosis.
El té blanco también contribuye a la reducción del colesterol LDL (5-10 mg/dL) y al aumento del colesterol HDL (2-5 mg/dL), favoreciendo un perfil lipídico más saludable.
Las metilxantinas presentes en el té blanco (cafeína, teofilina y teobromina) estimulan la termogénesis, aumentando el metabolismo basal en un 4-5%. Este efecto, combinado con la activación de la enzima AMPK, favorece la oxidación de grasas y puede apoyar el mantenimiento de un peso corporal saludable.
Los estudios también muestran una mejora en la sensibilidad a la insulina del 10-15% y una reducción de la glucemia en ayunas del 5-15%, convirtiéndolo en un aliado valioso en la prevención de la diabetes tipo 2.
¿El té blanco es adelgazante? Es importante aclarar que el té blanco no es un producto adelgazante milagroso. Aunque puede apoyar el metabolismo y la oxidación de grasas, la pérdida de peso siempre depende de un enfoque holístico que incluya una dieta equilibrada, actividad física regular y un estilo de vida saludable.
La sinergia entre la cafeína y la L-teanina crea un efecto único: estimulación mental sin agitación. La L-teanina promueve la producción de ondas cerebrales alfa, asociadas a un estado de relajación alerta, mientras que la cafeína mantiene la concentración.
Estudios longitudinales japoneses han demostrado una reducción del 28% en el deterioro cognitivo entre los consumidores regulares de té, gracias a la protección ofrecida por las catequinas contra la agregación de proteínas amiloides típica del Alzheimer.
El té blanco potencia las defensas naturales del organismo, aumentando la actividad de las células natural killer y modulando la respuesta inmunitaria. Las propiedades antivirales son particularmente eficaces contra los virus de la gripe, bloqueando la replicación viral.
La investigación de la Universidad de Granada ha destacado que el té blanco ofrece los mayores efectos protectores sobre los tejidos óseos y cartilaginosos, con un aumento de la densidad mineral ósea del 2-5% y una reducción del riesgo de fracturas del 13-22%.
Para la salud dental, el té blanco reduce la incidencia de caries en un 20-30% y combate la enfermedad periodontal gracias a sus propiedades antibacterianas.
A pesar de los numerosos beneficios, el té blanco presenta algunas contraindicaciones que es importante conocer para un consumo consciente.
El consumo excesivo de té blanco (más de 3-4 tazas al día) puede causar varios efectos secundarios relacionados principalmente con el exceso de cafeína.
¿Cuándo consultar a un médico? Si se experimenta dolor en el pecho, palpitaciones persistentes, dificultades respiratorias o trastornos del sueño prolongados, es importante consultar inmediatamente a un profesional de la salud.
La preparación del té blanco es un arte que requiere delicadeza y precisión para preservar sus sutiles aromas y propiedades beneficiosas.
Proporciones ideales:
Tiempos de infusión:
El método Gong Fu permite explorar todas las sutilezas del té blanco a través de múltiples infusiones breves. Después de un enjuague inicial de 5 segundos, se procede con la primera infusión de 5-10 segundos, aumentando gradualmente el tiempo para cada infusión posterior. Un té blanco de calidad puede ofrecer hasta 8-10 infusiones, cada una con características aromáticas únicas.
El té blanco se adapta perfectamente a diferentes momentos del día, ofreciendo energía sin agitación.
El mundo del té blanco ofrece una gama fascinante de variedades, cada una con características únicas que reflejan terroir, cultivares y técnicas de procesamiento específicas.
El Bai Hao Yin Zhen Yunnan de Terzaluna representa la excelencia del té blanco, proveniente del pueblo de Tang Te en el condado de Jinggu. Este té extraordinario está producido a partir de la variedad Camellia Taliensis, cultivada a 1300 metros de altitud, y presenta un perfil aromático más intenso y complejo en comparación con la variedad tradicional de Fujian.
Las yemas plateadas, recolectadas en primavera de 2024, ofrecen un licor dorado con notas de miel persistente y toques florales frescos. La excepcional relación calidad-precio lo hace accesible incluso para los principiantes que desean descubrir la excelencia del té blanco.
Descubre el Bai Hao Yin Zhen Yunnan de Terzaluna - Calidad Premium a Precio Excepcional
Yin Zhen, YunnanYin Zhen, Yunnan 50 g Notas delicadas de durazno y fruta amarilla Cosecha 2024 Hecho exclusivamente de yemas Versión menos costosa del té blanco Yin Zhen A partir de 9,50€ Comprar
El Ya Bao de Terzaluna es un té blanco único en el mundo, producido a partir de yemas recolectadas manualmente de árboles silvestres de Yunnan. Estas yemas especiales, a diferencia de las tradicionales, habrían dado origen a nuevos troncos en lugar de hojas.
El perfil gustativo es sorprendentemente complejo: una combinación de notas florales y moscatel con un final ligeramente ahumado. Su capacidad de mejorar con el envejecimiento lo convierte en una inversión para el futuro, mientras que su rareza lo transforma en una experiencia única para los verdaderos conocedores.
Explora la Unicidad del Ya Bao - El Té Blanco Silvestre más Raro
Ya bao 50 g Té hecho de solo gemas recolectadas a mano Sabor floral y moscato, con un ligero toque ahumado al final Muy bajo contenido de cafeína A partir de 7,50€ Comprar
El White Pine Needles de Terzaluna, proveniente de Zhejiang, ofrece un excelente punto de entrada al mundo del té blanco. Compuesto solo por yemas, presenta un sabor afrutado y delicado con una relación calidad-precio inmejorable.
Recolectado dos veces al año, este té demuestra que la excelencia no tiene que costar una fortuna. Sus notas frescas y delicadas lo hacen perfecto para quienes se acercan por primera vez al té blanco.
Comienza Tu Viaje en el Té Blanco con el White Pine Needles Terzaluna
Agujas de pino blanco 50 g Té blanco fresco y delicado Excelente relación calidad-precio Rico en antioxidantes A partir de 5,00€ Comprar
El Bai Mu Dan de Terzaluna está disponible tanto en la versión fresca como en el preciado pastel prensado de 100g de 2019. La versión fresca, proveniente de Baise en Guangxi, ofrece un sabor agradablemente delicado con notas florales y dulces.
El pastel prensado de 2019 de Fuding representa una oportunidad para descubrir cómo el té blanco evoluciona con el envejecimiento, desarrollando notas cada vez más dulces que se inclinan hacia la fruta madura. Puede ser consumido inmediatamente o conservado para un envejecimiento adicional.
Descubre el Bai Mu Dan de Terzaluna - Tradición e Innovación
Pastel Bai Mu Dan Fuding 2019 Té blanco prensado artesanalmente en tortas Cada torta pesa 100g Cosecha 2019 19,90€ Comprar
La correcta conservación del té blanco es fundamental para preservar sus propiedades y permitir la evolución aromática con el tiempo.
El té blanco está impregnado de encanto y misterio. Durante la dinastía Song, el emperador Hui Zong estaba tan obsesionado con el té blanco que esta pasión contribuyó a la pérdida de su imperio. Los métodos ceremoniales eran tan elaborados que solo monjes expertos podían prepararlos.
El té blanco simboliza pureza, estabilidad y fertilidad en la cultura china. En las ceremonias nupciales tradicionales, se utiliza para expresar respeto y gratitud hacia los padres, una tradición que se remonta a más de 1000 años.
Los nombres poéticos de las variedades reflejan la estética china: "Agujas de Plata con Pelusa Blanca" para el Bai Hao Yin Zhen, "Peonía Blanca" para el Bai Mu Dan, "Ceja de la Longevidad" para el Shou Mei.
Después de explorar el fascinante mundo del té blanco, es hora de transformar el conocimiento en experiencia. Terzaluna te ofrece la oportunidad única de acceder a una selección exclusiva de tés blancos exquisitos, seleccionados directamente de los productores durante viajes a China, Taiwán y Japón.
Cada té de la colección Terzaluna cuenta una historia de pasión, tradición y búsqueda de la excelencia. Desde los maestros del té en las montañas de Fujian hasta los innovadores de Yunnan, cada productor es elegido por su dedicación a la calidad y el respeto por las técnicas tradicionales.
La selección abarca desde el prestigioso Bai Hao Yin Zhen Yunnan, con su perfil aromático único, hasta el misterioso Ya Bao salvaje, pasando por las delicadas Agujas de Pino Blanco y el complejo Bai Mu Dan. Cada variedad representa una oportunidad de descubrimiento, un viaje sensorial que enriquece el conocimiento y el placer de la degustación.
Elegir Terzaluna significa confiar en expertos que comprenden la importancia de la trazabilidad, la frescura y la autenticidad. Cada té viene acompañado de su historia, información sobre la cosecha y consejos para la preparación perfecta.
Explora la Colección Completa de Tés Blancos Exquisitos de Terzaluna: Donde la Tradición y la Calidad se Encuentran